Tras el visionario proyecto Saruyama, Kita amplía el universo de su propuesta con las Saruyama Islands, miniestructuras habitables que permiten infinitas configuraciones espaciales.

El primer sofá del proyecto, precursor de gran poesía visual, estaba compuesto por tres módulos geomorfos diferentes que formaban una isla circular. Con las Saruyama Islands, se desarrolla un archipiélago de elementos independientes y coloridos: pequeños asientos, chaise longues y mesitas. Cada elemento interpreta un movimiento o variación de flujo, integrándose en la estructura orgánica y coherente del proyecto original.

MOROSO